martes, 1 de diciembre de 2009

Una buena pregunta

Por El Periodista Iracundo
Mi compañero de trabajo, Alfonso García, se hizo una autoentrevista bastante interesante, que me gustaría poder contestar yo, dado que a mí también me han hecho las mismas preguntas por nuestra labor: reportero de nota roja, que como bien dice Alfonso, mucha gente considera deleznable este trabajo, y los menos lo admiran, aun sin conocer de fondo lo que hacemos.

- ¿Cuando duermes no tienes pesadillas?
No, la verdad es que esto se tiene que tomar como es, como un trabajo, que si bien nuestra actividad gira en torno a las desgracias y tragedias, los reporteros de nota roja debemos estar conscientes que la muerte es algo con lo que todos convivimos, que es parte de nuestra realidad, de nuestro día a día sin importar a lo que te dediques.
Y que como dice el dicho: cuando te toca aunque te hagas a un lado.
si bien estamos expuestos a ver las maneras más lamentables en las que una vida puede terminar, por el bien de nuestra sique, debemos superarlo, aunque no sea del todo, pero no podemos darnos la oportunidad que nos afecte más allá del momento en que lo estás viendo.

- ¿ Cómo le haces para enterarte?
No sería bueno dar la receta secreta, por ejemplo, del pollo KFC, por eso nosotros debemos ser bastante cerrados en andar comentando nuestras técnicas, yo lo que les puedo decir que el mundo de la nota roja encierra personajes, desde policías, péritos, paramédicos y gente en general, que se les alza el ego al verse en el periódico, o con saber que ese accidente ellos lo reportaron al periódico.
Además que un reportero sin suerte está condenado a chafear, eso también cuenta.

-¿No sientes feo de publicar la tragedia ajena?
No, porque más allá que sea ajena, son cuestiones que suceden y no podemos tapar el sol con un dedo, no porque no publiquemos una muerte la persona se va a parar y a andar, y también estamos conscientes que así como a Pito Pérez le tocó nos puede suceder con nuestro círculo cercano.

- ¿Amarillista?
No, el término amarillismo viene de otra cosa muy diferente a lo que se cree que es, pero ese es tema de otro día para analizarlo a profundidad.
Manejemos mejor el tema alarmista, y ahí sí les puedo decir que ninguno de mis compañeros ni yo hacemos uso de adjetivos o palabras que puedan caer en el alarmismo, nosotros retratamos lo que vemos en las palabras, sin aumentar ni quitar nada, eso nos diferencia (Metro) de otros medios.

- ¿Qué es lo más fuerte que has visto?
He de admitir que aunque los niños no me gustan, me es muy complicado hacer coberturas en las que menores de edad se ven involucrados, apenas el domingo 22 de noviembre me tocó la muerte de un bebé de 2 años porque la camioneta en que viajaba se fue al barranco, creo que ese y un tipo que se carbonizó en su camioneta han sido los más desagradables.
Aunque deben saber que más que la muerte, son los vivos, en este caso los familiares, los que hacen que a uno se le forme un nudo en la garganta cuando llegan a reconocer los cuerpos.

-¿Sangre fría?
Sí y no, sí porque debes mentalizarte en el momento en que estás frente a un cuerpo o un accidente, que estás haciendo tu trabajo y dejar de lado por un momento el lazo persona - persona.
Y no, porque necesitas ser un caliente (en el buen sentido de la palabra) para poder ir hasta lo alto de un cerro, a una laguna oscura y fría o bajar a un barranco para hacer tu chamba.

-¿No te impresiona nada?
Claro que sí, como ya lo mencioné antes, cuando los padres ven a su hijo muerto al lado de una motocicleta o ahogado en una laguna, cuando los hijos ven que su padre o su madre yace tendido sobre una carretera y comienzan los gritos desgarradores, provocan que a uno la piel se le ponga de gallina o que una que otra lágrima invada el ojo, aunque casi nunca la dejamos salir.

- Si nadie está en desgracia no tienes trabajo?
En cierto modo, pero por fortuna tenemos otras fuentes que cubrir, o podemos hacer notas contrarias a las rojas, notas en las que arranques una sonrisa en vez de un trago amargo, pero sí necesitamos de las tragedias para cubrir la nota roja.
Esto no significa que todas las mañanas salgamos pidiendole al cielo o al de abajo o a quien sea, que haya accidentes o desgracias, si nos vamos en blanco lo lamentamos por la sección pero lo celebramos porque nadie murió ni se lesionó.
Aunque siempre tenemos que estar conscientes que la muerte está a diario y de que hace su trabajo... lo hace.

Si quieren ver las respuestas de mi compañero Alfonso visiten su blog http://alfonsogarciag.blogspot.com

3 años desastrosos

Por El Periodista Iracundo

Sé que muchos me identifican como perredista y afin a Andrés Manuel López Obrador, por mi pasado en el que trabajé para este partido y porque apoyé la candidatura del ex Jefe de Gobierno, que la verdad no sé si estaríamos mejor con él, pero algo me queda claro, no estaríamos peor de como estamos actualmente.
Pero esta es una crítica ciudadana a los 3 años de gestión de Felipe Calderón.

Bien dicen que lo mal comienza, mal termina, y desde el primer minuto de su administración, Calderón empezó con el pie izquierdo (es zurdo al fin de cuentas), nunca en la historia se había dado que un mandatario electo entrara por la puerta trasera, en todo sentido, para tomar posesión.
Si Calderón ganó o hubo fraude en las elecciones es algo que ya sale sobrando, pero los resultados hasta el momento son un desastre.
En materia de seguridad, Calderón se aventó la grandiosa idea de "declarar la guerra al crimen organizado" para buscar su quebrada legitimidad. Para ello mandó a la calle a las Policías Federales y al propio Ejército a hacer labores que no les corresponden.
Qué ha dejado toda esta faramalla de la guerra al narco: 16 mil ejecutados de 2006 a 2009 (Milenio del 1 de diciembre).
Y mientras los cárteles se siguen eliminando entre ellos, las poblaciones de lugares como Michoacán, Guerrero, el Estado de México y los estados del norte, no pueden vivir tranquilos.
Tan solo en Municipios como Temascaltepec, Tejupilco, Amatepec, Tlatlaya o Luvianos, al sur del Edomex, la gente vive temerosa, asustada y extorsionada por los cárteles, quienes hasta el lujo se dan de montar retenes en las carreteras que conectan esos poblados, sin que la Policía Federal o el Ejército los pare.
De ahí enlacemos el tema del desempleo, que cada mes aumenta y aumenta, mientras el gris y odioso dizque secretario del trabajo se la pasa peleando con Martín Esparza y los electricistas, y Calderón se regodea que, según él, este último mes se crearon 250 mil empleos.
Lo cierto es que las cifras indican que tan solo el último registro indica 6.41 por ciento de desocupación, lo que genera que se aumenten los índices de pobreza, que en lo que va del trienio está en 6 millones de nuevos pobres.
Si bien la crisis económica no se la podemos achacar a Calderón, sí hay que reclamar el mal manejo que ha hecho de la situación, ya 4 premios nobel lo han dicho (claro que de inmediato han brincado los infumables miembros del gabineta para tildar de ignorantes a los premios nobel (vlaga semejante estúpidez) y es más que obvio que el catarrito del que tanto habló el redondo Carstens ya es un coma pulmonar tremendo).
Basta con poner el ejemplo de mi accionar diario: las ventas de temporada se han ido en picada, me ha tocado entrevistar vendedores y comerciantes establecidos en épocas como Días del Niño, de las Madres, del Padre, regreso a clases, Fiestas Patrias, Halloween y Días de Muertos, y en todas han coincidido que ni las moscas se les paran (esto en Toluca, Metepec, Zinacantepec y municipios del Valle de Toluca).
Y si así nos seguimos en temas como política interna, externa, libertad de expresión y demás podríamos llevarnos una tesis completa.
Sí, esta es una crítica bastante punzante, pero como lo manejé en aquél 2006 cuando reconocí que Calderón tomaría posesión: si da muestras de hacer bien las cosas en lo que resta de su gestión aquí, en este espacio, las reconoceremos, pero mientras habrá que ver si puede con el paquete en 3 años que le restan.