miércoles, 16 de septiembre de 2009

las 5...

Esta es la lista de varias 5 cosas que tengo en mente.
Los y las 5...
países que quiero visitar:
1 Cuba (ya)
2 Canadá
3 Italia
4 Holanda
5 Costa Rica

... destinos mexicanos
1 Mazatlán (ya)
2 Los Cabos
3 Cancún
4 Playa del Carmen
5 Oaxaca

... políticos que me gustaría entrevistar
1 Barack Obama
2 Andrés Manuel López Obrador
3 Hillary Clinton
4 Hugo Chávez
5 Fidel Castro

... deportistas que me gustaría entrevistar
1 Alex Rodríguez, beisbolista (ya)
2 Michael Schumacher, piloto
3 Michael Jordan, basquetbol
4 Rafael Nadal, tenis
5 Yelena Isinbayeva, saltadora

... artistas
1 Carmen Salinas
2 Susana Zavaleta
3 Robin Williams
4 Jack Nicholson
5 Merryl Streep

... personajes de la historia
1 Adolf Hitler
2 Benito Juárez
3 Porfirio Díaz
4 Jesús de Nazareth
5 Aristóteles

finalmente, mi sueño guajiro de posibles novias, acompañantes, concubinas o como lo quieran llamar...
1 Beyoncé
2 Halle Berry
3 Shakira
4 Angelique Boyer
5 Maria Sharapova

Opinen o compartan sus cinco

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Mis zapatos sucios

Este texto lo dedico a mis amigos de Puebla y mis camaradas de Toluca, que cumplimos uno y dos años, respectivamente, siendo la Voz de la Metropoli.

Todos siempre queremos dar la mejor impresión, por eso cuando tenemos una cita, ya sea de trabajo o personal, tratamos de ir, como dirian las abuelitas, de pipa y guante.
Sacamos los mejores trapos que tenemos, los zapatos los lustramos tanto que rechinan con cada trapazo, el perfume marea hasta diez cuadras a la redonda, en fin, salimos como galanes de telenovela o como concursante de belleza en el caso de las mujeres. Claro que también están las y los que exageran y terminan con look de mujerzuela o de pachuco cincuentero.
Cada mañana que salgo a trabajar, me baño, me lavo los dientes, me pongo mi respectivo pantálón, mi camisa y batallo un poco al hacer el nudo de la corbata, procedo al talco, la crema y la loción; esto realza más mi personalidad y si bien es agradable diferenciarse de los demás por la elegancia o formalidad de la vestimenta resulta que me gusta más cuando termina el día.
Dirán que estoy loco o que he bebido demasiado, pero cuando regreso a mi cubil (no felino) lleno de tierra, de smog, con cierto olor a jornada intensa (o sea a sudor) y veo mi ropa,, en específico mis pantalones y mis zapatos, llenos de lodo, salpicados de fango o con las huellas de la batalla... me queda la satisfacción que fue un día productivo, que cumplí con mi deber y que como buen periodista, salí a patear las calles para conseguir las notas respectivas.
Claro que si hay compromiso post trabajo un nuevo baño rejuvenece hasta al más cascado jeje.